jueves, 21 de mayo de 2015

Si hoy fueran las elecciones



Si hoy fueran las elecciones…
Si hoy fueran las elecciones seguramente me hubiera levantado temprano, y como nuevo en la delegación buscaría la casilla que me corresponde, llegaría a la enorme fila (quiero creer que así será) y me formaría, por supuesto me llevaría un libro para pasar el tiempo o tal vez me distraería viendo a las personas, tratando de descubrir a los caza votos; si hoy fueran las elecciones.
Si hoy fueran las elecciones esperaría que las calles, postes, bardas, espacios televisivos, de radio y en los impresos estuvieran libres de tanta propaganda política y que por unos días pudiéramos descansar de las fotos “retocadas” de los candidatos, de las frases y promesas, de los ataques y de tanta contaminación visual y auditiva.
Si hoy fueran las elecciones esperaría no escuchar acusaciones de que se están haciendo fraudes o de que no se permitió colocar casillas.
Si hoy fueran las alecciones me gustaría saber que no hay enfrentamientos o levantamientos; me gustaría que se realizará un ejercicio limpio y sin violencia.
Si hoy fueran las elecciones quisiera que todos los mexicanos acudieran a votar y emitieran su voto de manera responsable.
Si hoy fueran las elecciones desearía que los partidos fueran honestos, que los perdedores aceptaran el resultado sin reclamos, que los ganadores se pusieran a trabajar y que el INE garantizará una lectura clara de los votos.
Si hoy fueran las elecciones me gustaría que todo lo anterior no fuera parte de un sueño y que aquella frase que Calderón de la Barca escribió en el monologo de Segismundo, en el que dice “¿Qué es la vida? Un frenesí. ¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una ficción; y el mayor bien es pequeño;  que toda la vida es sueño y los sueños, sueños son” no se aplique a mis palabras ahora escritas, no quiero sentir que mi vida y las elecciones son un sueño.