No te pudiste detener

No te pudiste detener, te fuiste, te hundiste en mi corazón, te hundiste profundo me dejaste herido, herido de ti, muriendo por ti y en ti.

No te pudiste detener, emprendiste el vuelo alto, recorriste mi cuerpo y asaltaste mi alma, no te dejaste alcanzar.

Te llamo

Las horas pasan lentamente
el día es frío, el sol no calienta
tu cuerpo a la distancia
mis sueños te llaman
te extraño

Te amo

Tus labios

Tenerte entre mis dedos
sentir como te deslizas
mojar tus labios
rozarlos, mirarlos
hundirme en ellos
vivir, vibrar y morir en ti

Necesito

Necesito tus palabras
tus sueños
tu mirada
tu piel

Necesito vivir, soñar y morir en ti

Tenerte cerca

Es el deseo de tenerte cerca
mi corazón
mi alma
mi cuerpo
estallan en ti

Muero en ti y por ti

Entre

Entre el estar y no estar, entre las frases absurdas del consuelo de una próxima mirada
entre la fe y la esperanza, entre el sentimiento de entrega y las ganas de verte
entre mis brazos que extrañan tu cuerpo, entre mis sueños que te tienen siempre
entre tus piernas, entre tus labios, entre tu alma
ahí estoy

Ausencia

Palabras que no entiendo
palabras que no llegan
sonidos sin eco
mis manos sin ti

Sueños que se esconden
en la ausencia de tu piel

Son

Los sonidos del continente se convierten en palabras que vienen de mis sueños
son palabras que se esconden en los jardines de mi voz
son caricias que no llegan y se pierden en tu piel
son deseos que se disuelven en la distancia de tu amor

A lo lejos

El recuerdo de una guerra civil
una gran piedra que observa y guarda a los caídos
un sueño vigilado por la piedad
una mirada que se pierde en el valle

Mis manos que te siguen buscando
mis besos que te esperan
mi cuerpo que te extraña
mis palabras que te gritan

Mi tinta en ti

Extraño dibujar historias en tu espalda
tejer con mis dedos tus cabellos
dejar mi tinta en tu alma
morir por instantes en ti
y verte vivir por siempre